La Prensa
Elizabeth Romero
- Angustia, dolor e impotencia tras agresión de los grupos de choque del gobierno de Ortega
Como “terrorismo de Estado” calificó ayer el obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio José Báez, la violencia en contra de los adultos mayores y jóvenes, y las pretensiones del oficialismo de realizar mañana una marcha contra la protesta de los ancianos por sus pensiones reducidas.
“Es un acto terrorista, eso es condenable bajo todo punto de vista y si este Gobierno responde a las demandas de justicia social de este pueblo con marchas y contramarchas, violencias y agresiones eso es terrorismo de Estado, que lo tengan en cuenta y lo reflexionen, no es así que se resuelven los problemas en Nicaragua”, sentenció el religioso.
Los obispos Báez y Leopoldo Brenes, y monseñor Miguel Mántica, visitaron ayer el sitio donde se registró la agresión en contra de adultos mayores y jóvenes que apoyan la protesta de los ancianos.
Se repliegan
Al verse desamparados y que sus vidas estaban en riesgo, los jóvenes se trasladaron al atrio de la Catedral, donde pidieron a las autoridades religiosas que les permitieran quedarse en el lugar.
Debido a la presencia de los jóvenes las autoridades religiosas de la Catedral de Managua decidieron suspender el oficio religioso de las 8:00 a.m. A las 11:00 a.m., la misa será oficiada por el obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez.
Los grupos de choque del orteguismo aprovecharon las horas de la madrugada y con el silencio aprobador de la Policía, la arremetieron contra estos. Los testimonios son múltiples
Linda Gutiérrez es una de las que brinda asistencia médica a los adultos mayores, relató que atendía a dos de ellos cuando las turbas los lanzaron al suelo y los golpearon.
“Yo estoy como a dos metros de la valla policial y mi primer instinto fue acercarme a los policías que son quienes deben resguardar el orden y seguridad y me tiré a los pies de un policía que me pateó en el estómago”, fue el testimonio de una de las jóvenes que por seguridad pidió omitir su nombre. La muchacha dijo que en ese momento la embargó “un sentimiento de impotencia”.
En el lugar los agresores no solo les recetaron golpiza a los presentes, sino que los despojaron de celulares, carteras, dañaron vehículos y se llevaron a seis de los mismos. Hasta ayer no había un recuento exacto de daños, detenidos y lesionados.
El sonidista, Eddy Desma, fue a denunciar que su microbús lo fueron a estrellar en un sector del barrio San Judas y al presentarse a denunciar el caso, la Policía lo detuvo, confirmó Ana Quirós.
El vocero de la Policía, comisionado mayor Fernando Borge, al mediodía de ayer dijo no conocer sobre lo sucedido.
Los obispos intentaron convencer a los grupos oficialistas, como la Juventud Sandinista, de que se fueran a sus casas porque generaban tensiones. Este grupo se instaló con alto sonido a un lado de la rotonda de Plaza Inter. Estos alegaron que estaban en apoyo a los adultos mayores.
“Seamos serios porque aquí no somos tontos tampoco aquí no nos van a engañar, eso se opone a la paz están creando tensión”, expresó Báez. La reacción de los integrantes de la JS fue corear la consigna utilizada en los ochenta en la primera misa celebrada por el papa Juan Pablo Segundo: “!Queremos la paz!”. Báez en un tono fuerte dijo: “Cálmense, cálmense, que así le gritaron a Juan Pablo Segundo, y la primera que quiere la paz es la Iglesia, lo dijo el Papa y lo decimos”.
La presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez, quien visitó el lugar calificó como “la agresión más indiscriminada que pudo haber cometido este Gobierno”. Núñez consideró que con esa agresión que ayer provocaba desolación entre los protestantes “se están agotando aquí todas las posibilidades de encontrar una solución pacífica”.
http://www.laprensa.com.ni/2013/06/23/nacionales/151914-terrorismo-de-estado